Portugal tomará medidas drásticas contra la Covid-19 una vez pasadas las Navidades. Antonio Costa ha annciado que del 2 al 9 de enero, se van a cerrar colegios, bares y discotecas y será obligatorio teletrabajar. Se ha previsto una compensación económica a los negocios que cierren y los colegios iniciarán el curso unos días después de lo previsto. El objetivo es evitar que tras las reuniones familiares vuelvan a incrementarse los contagios.
Además desde el 1 de diciembre, los que entren en el país por vía aérea deberán mostrar un test negativo, aunque tengan un certificado de vacunación. Las compañías que no lo hagan serán sancionadas. Para implantar todas estas medidas, el gobierno portugués activará el estado de calamidad, un escalón anterior al de emergencia nacional.
Portugal es el país de Europa que tiene a más personas vacunadas, un 88% de la población tiene la pauta completa, a diferencia de los del centro y el norte del continente en los que las tasas de vacunación son menores y los contagios están subiendo peligrosamente. Austria se ha confinado enteramente durante 20 días, en Alemania varios estados han suspendido los mercadillos navideños y se exige el pasaporte Covid para entrar en muchos establecimientos.
A pesar de la alta tasa de vacunaciones, la incidencia acumulada en Portugal es de 251 casos por 100.000 habitantes y están subiendo las hospitalizaciones y de forma moderada el número de muertos. Estas cifras superan a las de nuestro país, con una tasa de incidencia de 160 y 27 muertes.
El presidente Antonio Costa, ha recalcado que la situación es mucho mejor que la de las Navidades anteriores, lo que permitirá que se puedan vivir con una cierta normalidad antes de la semana de contención que habrá después.
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